Una falta magníficamente lanzada por Piti en el minuto 90 dio los puntos al Granada en un partido de fuerzas parejas, en el que los visitantes tuvieron más el balón y el Levante, que falló un penalti en la primera mitad, buscó el gol a la contra.
El Granada encontró mucho premio y el Levante excesivo castigo en un choque que parecía abocado al empate y que se resolvió cuando ambos equipos estaban pendientes de no perderlo.
El Levante presentó novedades en el equipo con la entrada de Vyntra como central y de Lell como hombre de banda derecha por delante de Pedro López, mientras que el Granada inició el encuentro prácticamente con un 4-3-3, con Buonanotte por la derecha y Pereira por la izquierda como extremos
En la primera parte el balón estuvo en poder del Granada, que ejerció un control intrascendente del juego ante un rival que le esperaba en su parcela con el objetivo de salir al contragolpe.
Sin embargo, la línea media el Levante no acompañaba las escasas recuperaciones de balón que conseguía con la creación de peligro, lo que unido a la falta de llegada del equipo andaluz propició un juego sin alicientes.
Mediado el primer periodo esta dinámica se vio interrumpida por un potente disparo de Diop que rechazó Roberto, acción tras la que el árbitro castigó al Granada con un penalti por derribo de Iturra a El Zhar.
El mismo El Zhar lanzó fuerte y por el centro y Roberto rechazó el balón, lo que devolvió el partido a la dinámica previa a estas dos jugadas.
El Levante se animó un poco, pero no lo suficiente como para que la meta del Granada viviera situaciones del peligro, mientras que un disparo de Buonanotte fue la única opción clara para el conjunto forastero antes del descanso.
La segunda mitad dio comienzo con la misma tónica de dominio visitante y búsqueda de la contra por parte local, aunque con más vivacidad en el juego por ambas partes.
El mayor dinamismo en el juego benefició más al Levante que al Granada y mediado el segundo periodo se jugaba más cerca de la meta defendida por Roberto, ya que el conjunto visitante había perdido el protagonismo de la primera mitad.
En cualquier caso, el encuentro entró con las fuerzas niveladas en su cuarto de hora final, en un fase del encuentro en la que ambos equipos querían combinar las opciones de ganar con la prudencia para no perder.
Keylor Navas hizo una gran parada a remate de cabeza de El Arabi (m.76) en una fase del encuentro en el que ambos equipos presumían que cualquier acierto o error iba a ser decisivo.
As fue. El acierto lo tuvo el Granada, con una falta que Piti convirtió en gol en un potente zurdazo, ante el que nada pudo hacer Keylor Navas, que había sido una de las estrellas del partido.
