La crónica del accidente ocurrido en el macizo del Atlas de Marruecos con el resultado de dos fallecidos es, según han dado hoy a conocer en rueda de prensa en Granada miembros del grupo de expedicionario, la siguiente:
Viernes 27 de marzo
El grupo integrado por el superviviente, Juan Bolívar Bueno, y los dos fallecidos, Jose Antonio Martínez y Gustavo Virués, se desplaza vía Algeciras-Tánger junto a otros tres miembros de la expedición, compuesto en su totalidad por nueve personas.
Sábado 28 de marzo
Algunas de las actividades previstas en el marco de la expedición generan un día de retraso sobre el calendario previsto.
Domingo 29 de marzo
Un segundo grupo llega a Marruecos, mientras que el integrado por Bolívar y los fallecidos se dirige al cañón del Wandras, donde tuvo lugar el accidente.
Lunes 30 de marzo
Los otros seis miembros del grupo inician una ruta en vehículo hasta Tabant con dificultades por la crecida de un río, tras lo cual prosiguen camino hasta a pie hasta Talat, donde duermen sin que tengan noticias del resto, lo que atribuyen a la falta de cobertura de móvil.
Martes 31 de marzo
Al seguir sin noticias del grupo, retrasada supuestamente por la nieve, decidieron esperar la llegada de Bolívar, Martínez y Virués, pese a que les dijeron que si no llegaban siguieran el recorrido.
Miércoles 1 de abril
Contactan con el refugio de Tarkedit, a la salida del cañón de Wandras, y les dicen que no han pasado por allí, momento en el que alertan de su desaparición a la embajada española a través del consulado y a la gendarmería y deciden ir al cañón.
Jueves 2 de abril
Tras solicitar por el camino una cuerda de 50 metros para el posible auxilio y hacer un largo recorrido en coche pasan la noche en la casa del alcalde de una aldea ubicada a cinco kilómetros de Amezri.
Viernes 3 de abril
A la espera de un helicóptero en Amezri que les conduzca hasta el cañón y al ver que no llegaba, deciden que cuatro de ellos asciendan hasta allí y otros dos se queden en Tessuet para mantener el enlace con la embajada y las familias. Una vez en la parte alta del cañón divisan una esterilla y alertan al grupo de rescate de bomberos de Granada.
Sábado 4 de abril
A la mañana revisan de nuevo el interior del cañón y los ven con claridad, avisan a la embajada, facilitan las coordenadas, llega un helicóptero de la Gendarmería con personal para el rescate y se confirma que hay un fallecido un malherido y un ileso, pero no sus identidades. La gendarmería llega al accidentado, lo sacan en una camilla pero no consiguen ascenderlo durante los 300 metros de subida, por lo que lo dejan en una terraza del cañón, en cuyo río pasó la noche.
Domingo 5 de abril
Llega el grupo de espeleosocorro pero la gendarmería le pide que se abstengan de acceder a la zona del siniestro.
Al mediodía se autoriza la llegada del grupo de rescate de la Guardia Civil, que llevaba días alertado en España, llegan al cañón, reconocen al cadáver y al inicialmente herido, que creen que había fallecido la noche anterior. Llevaba, dicen, más de siete días accidentado en una zona donde la temperatura ronda los 5 grados.
Lunes 6 de abril
Los cadáveres quedan en la parte alta del cañón a la espera de su traslado en helicóptero, lo que ocurre el martes 7 de abril, "nueve días después del accidente, cuatro tras ser localizados por sus compañeros y seis desde que se dio la alerta a las autoridades españolas y marroquíes".