Había ganas de fútbol, después de casi tres meses de parón. La celebración de la Eurocopa, que acabó con un desenlace de fantasía, ayudó a amenizar la espera, pero qué larga se puede llegar a hacer una espera cuando es para que el balón eche de nuevo a rodar. Por eso, las gradas del Manuel Bernal se llenaron en el
primer partido de pretemporada, insertado en un mes de julio marcado por un calor intenso, perfecto, eso sí, para un plan de playa, pero la ilusión por ver a la renovada UD Roteña de Paco Ávila pudo aún más. Aunque no solo se vieron camisetas rojillas, también del Atlético Sanluqueño, que se presentó como un rival a la altura en el encuentro inaugural de esta nueva etapa. Las aficiones de estos dos equipos acostumbrados a caminar históricamente de la mano como
entidades hermanas, se unieron para celebrar la fiesta del fútbol en un partido cargado de atractivos por los cuatro costados. Uno de ellos, quizás el más importante, el
debut de Dani Güiza con su nuevo equipo, que partió en la titularidad ante un Atlético Sanluqueño del que guarda un cariño especial por las
cinco temporadas que pasó en El Palmar. El último pichichi de español de Primera División tuvo una participación algo discreta durante los primeros 45 minutos que estuvo sobre el campo porque, después de colgar algunos buenos balones sin mayor trascendencia, fue sustituido en el descanso, aunque no lo hizo sólo.
Tanto un equipo como el otro realizaron un lavado de cara casi completo propio de un partido de pretemporada. Un carrusel de cambios convertido en una oportunidad ideal para ver la puesta en escena de caras desconocidas para muchos como
Pablo Román, Petaca, Taha y Óscar en el caso de la Roteña, o
Víctor Valverde, Valiño y Colau en el lado visitante. La pretemporada, después de todo, está para eso. Poner en funcionamiento ideas nuevas, estudiar a los futbolistas, probar distintas variantes y todo tipo de experimentos, aunque parece que es al equipo de la Ciudad de la Manzanilla a quien le salieron mejor. Al descanso, el Atlético Sanluqueño salió más entonado. Más activo. Más enchufado, acumulando la posesión de balón ante una Roteña que no encontraba la manera de tener presencia en torno a las inmediaciones del juvenil Fernando. Marcó la diferencia ante una Roteña que, en la primera parte,
no parecía ni mucho menos un equipo que compite cuatro categorías más abajo. Un tiro al travesaño de los visitantes fue de lo poco peligroso antes del descanso, pero la entrada de nombres llamados a ser importantes en esta nueva temporada en 1ªRFEF terminó añadiendo mucho peso a un solo lado de una balanza que no tuvo más remedio que decantarse.
Álex Guti fue quien terminó marcando el único tanto del encuentro a falta de diez minutos para el final.
Petaca también pudo marcar a través del contraataque en una de las pocas ocasiones en las que la sólida defensa visitante abrió un hueco, pero la parada del portero, que le cerró el espacio, conservó la victoria para un Atlético Sanluqueño que tuvo que sudar la camiseta para tumbar a una Roteña que se marchó
sin la posibilidad de regalarle un triunfo a su afición, pero con la cabeza alta de saber que no le puso las cosas nada fáciles a todo un equipo de Primera Federación.
