San Fernando

Los pescadores de la Casería fueron usados como reclamo comercial

Lo principal era que la constructora de las torres pudiera publicitar la promoción diciendo que tenía puerto deportivo. Se acabó el ladrillo y los abandonaron.

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  • Les dieron el caparazón.

El Club de Pescadores Deportivos Playa Casería de Ossio ha manifestado que viene pidiendo por activa y por pasiva al Ayuntamiento que acometiera la obra del dragado de la dársena de las embarcaciones de estas instalaciones municipales, sin resultado positivo. Esta situación la llevan sufriendo desde el año 2014 y la excusa siempre es la misma, no hay dinero, el interventor no lo aprueba o hay que comprobar la viabilidad del proyecto, entre otras excusas.

A cada una de esas excusas ha respondido la entidad a través de un comunicado. Sobre que no hay dinero, “hemos comprobado a través de la prensa y por declaraciones de la alcaldesa que había un remanente de 3.100.000 euros desde el año 2015 y no se ha querido acometer la obligación que tiene el ayuntamiento con estas instalaciones”.

Al argumento de que “el interventor no lo aprueba”, dicen que el Ayuntamiento y ellos mismos disponen de la suficiente documentación para demostrar al interventor que es responsabilidad del Ayuntamiento el mantenimiento del canal de entrada y el dragado de la dársena.

En cuanto a la viabilidad del proyecto, los pescadores deportivos son más tajantes a la hora de dejar claro cómo los han utilizado por parte de gobierno anteriores y además para beneficiar a una empresa privada que además terminó con el propietario en manos de la Justicia.

De esta forma recuerda que en el proyecto inicial “no hubo pegas ni dimes ni diretes. Sólo importaba que las famosas torres de la casería dispusieran de un Club Náutico para poder vender los pisos y los chalet adosados, y que a raíz de la negativa de la Junta de Andalucía a aprobar la construcción de otras tantas torres, se produjo el abandono de estas instalaciones hasta el punto de entregar dichas instalaciones al Club con chapas metálicas en el exterior”.

Así fue cómo ellos mismos tuvieron que hacerse cargo de unas instalaciones en cuyo i interior no había solería, las paredes eran de bloques y no de ladrillos como figuraba en el proyecto inicial y totalmente desnudas; la electricidad y la fontanería estaban sin terminar y la sala multiuso sin su proyector y medios audiovisuales.

Había sólo un aire acondicionado para todas las instalaciones, los pantalanes sin agua, sin luz, sin torretas de salvamento y un largo etcétera. Solo adecentar las instalaciones costó un dinero del que el club no disponía,  pero el anterior delegado del ramo, Pascual Junquera, dio un ultimátum:  “o nos hacíamos cargo como estaba o le daba carpetazo”.

Paradas las torres de la Casería, el desarrollo bestial para el Sector I-Casería de Ossio diseñado por el Ayuntamiento para una zona en la que se preveían grandes ingresos para las arcas municipales a través de las licencias de obras, todo se paró. La Casería dejó de interesar y se quedó sumida en el abandono ancestral que ya sufría mientras los socios del club pagan de su dinero lo que el Ayuntamiento había dejado de pagar como era su obligación.

“El abandono a que nos referimos se amplía a la zona de La Casería, desde el puente del Ferrocarril de acceso a la barriada y desde la Estación Centro del Ferrocarril hasta la Bahía. Es un cúmulo de despropósitos y los perjudicados son los residente en este barrio tan singular de San Fernando”, dicen.

“¿Dónde está la promesa del Paseo Marítimo hasta Bahía Sur? ¿Y la playa? ¿Y las zonas verdes? ¿Dónde están nuestros políticos? ¿Qué fue de ellos? ¿Quién ocupa esos puestos en nuestro Ayuntamiento? Queremos respuestas no promesas”, se preguntan ahora.

“Nosotros personalmente diríamos a nuestros políticos que se dejen de orgullo, rencillas y enfrentamientos y se pongan el mono de trabajo y que echen una mano a La Isla  y en especial a este barrio históricamente marginado y que buena falta le hace. Atienda nuestra petición aunque no estemos en época de elecciones”, dicen desde el club.

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