El presidente del Atlético Sanluqueño, Manolo Fernández, estaba hundido tras consumarse el descenso a la Tercera División. Era lo lógico porque en los últimos meses fue creciendo la ilusión de continuar en la Segunda División B. El equipo llegó a asomar la cabeza pero acabó hundiéndose ante el Murcia en un partido marcado por la desastroza actuación del colegiado.
La persona más representiva del club verdiblanco analizó los planteamientos marcados de cara al futuro en ‘Actualidad Atlética’, programa de deportes de la emisora de radio que dirige Manolo Marín.
Lo primero que dijo que “el club sabía las limitaciones que había pero hemos luchado hasta el final. Ahí meto a los directivos, el cuerpo técnico y los jugadores. Entre las papeletas por bajar debido al presupuesto estábamos nosotros. En enero hicimos un gran esfuerzo reforzando con nuevos jugadores al equipo. Antes había llegado Rafael Carrillo”.
Añade que “ lo del domingo fue impresentable. El árbitro nos dejó sin opciones de seguir luchando todavía por la permanencia. Fue una barbaridad. La tarjeta a Sana nada más empezar el partido, el penalti con el que nos castiga no lo es y además el jugador del Murcia se lleva el balón con la mano, no quiso enseñarle la cartulina amarilla a los jugadores del Murcia, el gol de Rufo fue legal y en el 1-3 hay falta a Sana. Si no es por el árbitro ahora mismo estábamos llenando autobuses para ir a Extremadura”.
Valora el hecho de que “si descendíamos teníamos que hacerlo saneados. El crédito económico lo hemos recuperado. Teníamos el presupuesto más bajo de la categoría. Esta semana los jugadores cobrarán el mes pasado y es importante empezar la próxima temporada sin deber dinero”.
Reconoce que “la primera vuelta fue mala y a Juanito no le salieron las cosas. Debíamos haber acabado con 4 ó 5 puntos. En la segunda vuelta también teníamos que haber sumado más suerte pero nos faltó suerte”.
Asegura que “lo vi el otro día en El Palmar no lo había presenciado en mi vida, los aplausos de los aficionados reconociendo el esfuerzo de sus jugadores. Estar en Segunda B es un premio y lo lógico por presupuesto es descender aunque con un poco de suerte hubiéramos seguido en la categoría”.
Elogia la labor de Rafael Carrillo: “Está hecho para dirigir al Atlético Sanluqueño. además de ser un perfecto conocedor de la categoría. Hace un menos y medio le dijimos que queríamos su continuidad, ya fuera en Segunda División B o en Tercera División. Todo depende de su situación laboral porque es profesor de Educación Física en Córdoba”.
Quiere levantar el ánimo: “Ha sido una pena no haber logrado la permanencia pero no debe ser un trauma el descenso. Habrá que luchar por estar arriba y acabar entre los cuatro primeros para tratar de ascender. Queremos hacer un gran equipo en Tercera División y trataremos de mantener todos los jugadores posibles de la actual plantilla”.
Finaliza diciendo que “estamos heridos por el descenso y porque la Segunda División B es una categoría muy bonita. Somos un club importante en Tercera División que ha estado durante tres de las últimas cinco temporadas en la Segunda División B. Pero tampoco hay que olvidar que hemos sido como un juanelo en presupuesto que ha competido contra grandes trasatlánticos, como por ejemplo el Murcia”.