Las secciones sindicales de CCOO, UGT y CSIF en el Ayuntamiento de Sevilla han anunciado la convocatoria de movilizaciones este jueves a las puertas del Consistorio, a las 13,00 horas, ante los "incumplimientos" del acuerdo firmado el día 28 de junio de 2016 con el alcalde, el socialista Juan Espadas, así como ante el "abandono" de los servicios públicos y las "privatizaciones".
El presidente del comité de empresa, Manuel Loza (CCOO), junto al secretario general de UGT en el Consistorio, José María Cobano, y el representante municipal de CSIF, Rafael Román, ha realizado en rueda de prensa este anuncio de movilización, una acción a la que no se suman los sindicatos de Policía Local (Sppme) ni de Bomberos (SPB) "al no entender la necesidad de salir a la calle", como sí la ven las otras tres centrales sindicales. "Como en otras ocasiones, hacen la guerra por su cuenta", añade Loza.
El representante sindical ha recordado que el acuerdo firmado con Espadas no suponía una "carta blanca" y que de los 44 puntos se ha cumplido una quincena, "siendo generosos", mientras que el resto "no hay perspectivas de que se cumplan". Por ello, ha puesto como nota al alcalde un suspenso, "un 3,5 o un cuatro raspado", teniendo en cuenta que el primer año "sí existió un impulso, pero ha quedado ralentizado".
Además, critica la política de recursos humanos, la "mala gestión" de los servicios y pide a Espadas que se "ponga las pilas", a la par que insta a los partidos políticos a "entenderse, porque si hay parálisis y no hay entendimiento no será bueno ni para los servicios ni para la ciudadanía".
Loza menciona la falta de personal, con 809 vacantes en una plantilla de 5.400 trabajadores municipales, así como la necesidad de negociar un calendario y una nueva relación de puestos de trabajo (RPT) que recoja la "realidad". Explica que la cobertura de bajas o los traslados de personal sí pueden cubrirse, pero no ocurre lo mismo con las jubilaciones o las excedencias. Entre las áreas más afectadas, se encuentra mantenimiento de edificios, donde faltarían unas 70 personas; Parques y Jardines, con 45 vacantes, el 25 por ciento de la plantilla; 16 en el Zoosanitario o las 34 plazas vacías de los 108 puestos del cementerio.
"Espadas no ha sido valiente en algunas decisiones, como la recuperación de las 35 horas o ante la retirada del Pleno de una propuesta para crear 43 puestos en servicios sociales. No se puede poner siempre por delante la figura del interventor diciendo que no deja hacer las cosas, sino que es necesario tener valentía para dar pasos", incide Loza, que sí reconoce "avances" con respecto al gobierno de Juan Ignacio Zoido (PP), como los planes propios municipales o las últimas 80 contrataciones.
De su lado, Cobano considera que "aún se está a tiempo" para retomar los acuerdos y volver a las mesas de negociación, teniendo en cuenta que el convenio colectivo vigente es de alrededor del 2000 y el reglamento laboral de varios años antes. En este sentido, pide que el convenio se adapte al nuevo régimen jurídico y a la nueva realidad social.
"Parecía que todo iba a fluir como el agua, pero un año después todo está parado", lamenta, recordando que las medidas contaban con fechas concretas de aplicación. Así, pone como ejemplo que en el primer trimestre del año tenía que estar terminada la oferta de empleo público, algo que "aún no ha ocurrido", mientras que el plan de igualdad se anunció en diciembre de 2015, pero "no han arrancado las mesas técnicas" para su aplicación.
En la misma línea, Román manifiesta su "decepción absoluta ante las expectativas creadas", ya que se esperaba un "cambio cualitativo y cuantitativo importante". Destaca la defensa del servicio público realizada por los trabajadores, que realizan la labor "pese a no tener medios y asumen responsabilidades que no son reconocidas".
"Hay tapones en recursos humanos y una falta absoluta de personal", lamenta, tras considerar que los acuerdos con el Ayuntamiento están "deliberadamente parados", entendiendo que esa "dificultad" en la prestación de servicios persigue "su externalización". En este marco, se piden inversiones en los sistemas informáticos de la Casa Consistorial, que son "del siglo pasado", según Cobano, teniendo en cuenta que llega a funcionar "incluso con fichas, pese a tener más de 5.000 trabajadores".