Unos seguidores ultras del Crystal Palace han hecho gala de toda su fuerza y su poco cerebro al destrozar el autobús de su equipo pensando que era el del rival, el Middlesbrough.
Estos tontos violentos, porque otro nombre no tienen, vieron el autobús aparcado en un hotel cercano al estadio del Crystal Palace y decidieron pintarlo con spray para dejar precisamente el nombre de su equipo escrito.
Pese a este incidente, el equipo local llegó al estadio usando este mismo vehículo, que al llegar causó sorpresa entre los presentes, pero no vergüenza a los errados atacantes porque posiblemente no sepan qué es eso.
Un empleado del club publicó las imágenes condenando a los asaltantes y destacando el estúpido error, que no se limitó a un lateral, ya que la parte trasera y el otro lado también sufrieron el efecto del spray de pintura.
Los daños se han valorado en casi 47.000 euros que tendrá que abonar el club afectado esperando que la policía pueda localizar a los autores de semejante desatino.
