Alejandro Ramírez | La muerte súbita del lactante se conoce científicamente para señalar la inesperada muerte de un niño, aparentemente sano, que aún no ha cumplido un año. Afortunadamente es un evento
raro, pero no menos traumático para quien lo vive. En el
90% de los casos a las víctimas les quedan menos de seis meses de vida, de hecho el pico de muerte súbita se produce entre el segundo y el cuarto mes.
Estadísticas en mano, el síndrome es más
frecuente entre los bebés prematuros nacidos de mujeres menores de 20 años.
Las causas de la muerte súbita
Actualmente no se conocen las
causas de la muerte súbita pero se cree que es el resultado de la combinación de una
serie de factores (físicos y ambientales) que tienen un impacto negativo significativo en el recién nacido.
Hay dos factores físicos que predisponen a la muerte prematura:
- Parto prematuro: los bebés que nacen antes de la semana 37 de embarazo son frágiles. En particular, no tienen un corazón y pulmones adecuadamente desarrollados. Esto significa que pueden ocurrir cambios respiratorios y cardíacos peligrosos
- Anomalías cerebrales congénitas: se han identificado áreas del cerebro que no funcionan adecuadamente en niños que fallecieron prematuramente, en particular las que regulan el ritmo cardíaco, la respiración y el despertar del sueño.
Factores ambientales
Los factores ambientales son numerosos y ninguno de ellos, en la medida de lo posible, debe pasarse por alto.
- Durmiendo con el recién nacido: causó sensación la noticia de una madre que se quedó sola en el hospital con su bebé que murió aplastado mientras estaba amamantando. Quedarse dormidos en la cama de forma conjunta es un hábito muy peligroso.
- Posición prona o de lado del bebé: El bebé que se pone a dormir de esta manera no respira bien porque sus vías respiratorias están bloqueadas.
- Elegir una superficie blanda: también en este caso el niño que se deja dormir sobre una superficie blanda tiene dificultad para respirar.
- Ropa excesiva: cubrir en exceso al recién nacido significa exponerlo al riesgo de hipertermia, o a un aumento brusco de la temperatura corporal.
- Consumo de tabaco, drogas y alcohol durante el embarazo.
Cómo prevenir la muerte súbita
La muerte súbita marca profundamente la vida de los padres que, después de un evento de esta magnitud, necesitan apoyo psicoterapéutico para superar incluso los sentimientos de culpa relacionados con la muerte de su hijo.
Uno se pregunta si es posible prevenir este síndrome, pero según los expertos, ningún método es completamente efectivo. Esto no quiere decir que no se puedan tomar algunas precauciones que puedan prevenirlo, como:
- Colocar al recién nacido en la cama en posición supina
- No sobrecalentar la habitación donde duerme el bebé
- No cubrir al bebé en exceso
- Retirar todos los juguetes de la cuna
- Elegir colchones firmes
- Dejar de fumar durante el embarazo.
