Había expectativas de que pulverizara récords, pero esta araña de Bourgeois se conforma con ser la tercera obra más cara de una mujer artista, una lista en la que constan otras tres de sus arañas, vendidas por entre 14 y 32 millones de dólares.
En 1996 se subastó otra araña de Bourgeois por 32 millones, cifra que ha sido superada hoy por poco y que mantiene en sus manos el estatus de la escultora «más cara».
La pintora modernista estadounidense Georgia O’Keefe tiene el récord para cualquier obra de una mujer artista gracias a la venta, en 2014, de uno de sus emblemáticos cuadros de flores, «Jimson Weed/White Flower No.1», de 1932, por 44,4 millones de dólares.
Louise Joséphine Bourgeois, que nació en París y se trasladó a los 27 años a Nueva York, es famosa por sus instalaciones y esculturas de gran escala, y particularmente por las arañas gigantes de bronce, que se han expuesto en los museos más importantes.
Aunque las arañas son motivo de disgusto para muchos, Bourgeois evocaba con ellas el recuerdo de su madre, una tejedora de tapices que murió cuando la artista tenía 21 años, y en alguna entrevista comparó la capacidad de ambas, de la araña y su madre, para «reparar» y «proteger».
La araña de Bourgeois también tiene detrás un importante componente psicológico, ya que la escultora enfrentaba así el trauma de la pérdida de su madre y la traición de su padre, que tuvo una larga relación extramarital.