EP | Una nueva investigación ha revelado que «muy probablemente» un notario judío reveló a los nazis la ubicación de la familia de Ana Frank, escondidos de las autoridades alemanas precisamente por ser judíos en el marco de la Segunda Guerra Mundial.
Esta es la principal conclusión de la investigación, presentada ante los medios neerlandeses este lunes y que identifica al notario como Arnold van den Bergh, que habría entregado a los nazis una lista de escondites de judíos en Ámsterdam para salvar la vida de su propia familia.
Van den Bergh era miembro del Consejo Judío, por lo que tenía muchos contactos y estuvo protegido de la deportación a campos de concentración en un inicio. No obstante, en 1944 perdió esta protección y, aparentemente por desesperación, reveló escondites para salvar a su mujer, a sus tres hijos y a él mismo.
La principal prueba de la investigación, que se ha extendido durante cinco años y en la que el equipo internacional ha utilizado las últimas técnicas, es una copia de una carta anónima que el padre de Ana, Otto Frank, recibió en 1946.
La carta original, que es donde se menciona el nombre del notario, ha desaparecido, pero se ha encontrado una copia en los archivos de la ciudad de Ámsterdam. Los investigadores han asegurado que nunca se había investigado esta pista en detalle.
El documento decía que los datos del refugio de su familia «fueron reportados a la Jüdische Auswanderung [oficina de emigración judía] por A. van den Bergh, que vivía entonces cerca del parque Vondelpark, en Ámsterdam. En dicha oficina de emigración tenían una lista completa de direcciones proporcionadas por él».
La Jüdische Auswanderung era el departamento alemán de emigración judía encargado de enviarlos a los campos de concentración en Alemania y Polonia entre 1941 y 1943. Según van Twist, Otto Frank pudo considerar plausible esa traición pero cree que no quiso seguir adelante con el asunto para no hacer daño a sus descendientes. «Sabía que Van den Bergh, fallecido en 1950, tenía hijas como él. Habría tenido que enfangar su nombre a título póstumo y dañar a sus descendientes», afirma otro de los investigadores del equipo, Vince Pankoke.
La familia Frank se escondió junto a otros cuatro judíos en una casa en Ámsterdam desde 1942 hasta 1944. Ana, que nació en 1929 y murió en 1945, escribió su famoso diario allí.
Todos fueron descubiertos por los nazis en agosto de 1944. La familia fue deportada a campos de concentración, donde fueron asesinados. Únicamente sobrevivió Otto Frank.