«Probablemente murió con el corazón roto de dolor», asegura Sam Woodrow, uno de los animalistas que vigilaba a los cisnes de la localidad de Kearsley, por la que atraviesa el canal de Manchester. Según parece, varios jóvenes fueron vistos lanzando grandes piedras y ladrillos a la zona donde estos animales habían situado sus nidos, por […]
El cisne macho desapareció, posiblemente muy asustado por el despiadado ataque de los jóvenes, mientras que la hembra fue hallada muerta junto al nido, pero sin señales de haber sido alcanzada por ningún objeto.