Tras una importante labor de búsqueda y reconocimiento en la zona donde se produjo el supuesto avistamiento, Gómez ha explicado que los restos que han aparecido corresponden a la depredación de una nutria que había excretado en la ribera los restos de un pez y un cangrejo que se había comido.
Asimismo, se han hallado rastros y aplastamientos que corresponden a presencia y paso humano, mientras que también hay otros indicios, tales como huellas, que «no son de diagnóstico» y, por tanto, «no se puede decir a que especie pertenecen».
«Hemos revisado meticulosamente cada rincón donde el animal ha podido tomar el sol o dejar marcas de huellas y no hemos encontrado nada», ha apostillado Gómez, quien ha avanzado que el operativo junto a la Guardia Civil continuará con una búsqueda «activa» para tratar de localizar «algún indicio que confirme la presencia de un reptil de gran tamaño».
Sin embargo, ha señalado que el hecho de no haber encontrado indicios de un reptil «no significa que no esté» en la zona, por lo que aún no se descarta su presencia.
Asimismo, se han hallado rastros y aplastamientos que corresponden a presencia y paso humano, mientras que también hay otros indicios, tales como huellas, que «no son de diagnóstico» y, por tanto, «no se puede decir a que especie pertenecen».
«Hemos revisado meticulosamente cada rincón donde el animal ha podido tomar el sol o dejar marcas de huellas y no hemos encontrado nada», ha apostillado Gómez, quien ha avanzado que el operativo junto a la Guardia Civil continuará con una búsqueda «activa» para tratar de localizar «algún indicio que confirme la presencia de un reptil de gran tamaño».
Sin embargo, ha señalado que el hecho de no haber encontrado indicios de un reptil «no significa que no esté» en la zona, por lo que aún no se descarta su presencia.