La policía aborta la reunión de más de 3.000 personas para jugar al escondite en un Ikea

Es muy conocida la broma de comparar los centros de Ikea con laberintos por la distribución de sus secciones. Puede que eso fuese el germen de una disparatada idea que se preparaba en Glasgow, donde más de 3.000 personas se habían citado a través de Facebook para jugar al escondite en uno de los locales de la multinacional sueca.

La policía abortó finalmente la quedada tras haberla detectado con el tiempo suficiente para que no llegaran los 3.000 citados.

Algunos adolescentes sí que habían logrado entrar. En grupos pequeños, habían accedido con normalidad al local, pero luego se fueron repartiendo para esconderse debajo de las camas, meterse en armarios o incluso neveras.

Estos fueron expulsados del local cuando «perdieron la partida» al ser encontrados por la policía, mientras que los demás fueron interceptados en la puerta de acceso para alegría de los responsables de la tienda, que ya se veían desbordados para controlar la situación.