La sequía que sufre Namibia obliga al gobierno a tomar medidas drásticas, algunas de ellas muy curiosas.
De momento, las autoridades han preparado la venta de mil animales salvajes de distintas especies ante la imposibilidad de mantenerlos en condiciones en los parques nacionales.
Insisten desde Medio Ambiente que la venta responde únicamente a la escasez de agua en las reservas y parques nacionales del país, acallando así rumores sobre otros posibles intereses.
El lote de animales a vender se divide en 500 búfalos, 150 gacelas, 65 oryx, 60 jirafas, 35 antílopes, 28 elefantes, 20 impalas, 16 kudus y otros tantos ñúes, entre otros ejemplares.
«Los pastos son tan escasos que, si no se venden animales, morirán de hambre», explicó el responsable del gobierno, añadiendo que con la venta se preservarán los pastos y se generarán los fondos necesarios para gestionar los parques nacionales.
Según parece, la subasta será abierta y la recaudación mínima esperada rondará el millón de euros.
