En pleno jaleo independentista a finales de 2017 un joven empresario malagueño fundó una empresa que ofrece productos típicos de Andalucía. El problema es el nombre, que, aunque le esté proporcionando una publicidad impagable, le ha costado una demanda de Puigdemont. ‘Pig Demont’ se llama la marca en cuestión, cuyo logo recuerda el rostro del […]
«No, no somos vagos, somos abiertos, emprendedores, nos gusta la luz, la alegría, la risa el compañerismo, ayudar, compartir, llorar, cantar… Nos gusta la vida», asegura también el texto de presentación de la web. «Consumir productos andaluces, es crear riqueza, en tu tierra, en tu pueblo, es asegurar un futuro mejor para nuestra tierra», sentencia.