«No eres capaz de clavarte el pene en una tabla»… «¿que no?… trae la pistola de clavos ahora mismo y verás». Así más o menos sería el diálogo de imbéciles en una obra antes de grabar el vídeo más estúpidamente peligroso que recordamos. Porque sí, hubo alguien que se clavó el miembro a una tabla […]
Roofer has his privates nail-gunned to a plank of wood for a sick dare https://t.co/k3jtYWmelN
— The Sun (@TheSun) March 19, 2018