Mientras le administraban la inyección letal, el condenado Eric Scott Branch dejó a todos atónitos al gritar «¡asesinos!» a la vez que golpeaba la camilla en la que había sido puesto para ser ejecutado por la violación y asesinato de una estudiante en 1993. Las drogas incluyen un poderoso sedante, pero el condenado, de 47 […]