Se repite la historia. Ya te contamos que en un parque chino cundió el pánico por culpa de un tigre de peluche que asustó a varias personas y alertó a la policía. Y entonces recordamos un caso parecido en Southampton (Reino Unido) en 2011, cuando otro tigre de juguete motivó hasta el cierre de un campo de golf y el despliegue de un helicóptero de la policía.
Pero no hay dos sin tres, así que otro tigre de juguete ha causado un revuelo similar. Esta vez ha sido en Aberdeenshire (Escocia), donde varios agentes de policía rodearon durante 45 minutos al supuesto animal antes de darse cuenta de que era de peluche.
La policía local de la localidad atendió la llamada de un granjero local en la que, visiblemente preocupado por sus 200 vacas, aseguraba que en su propiedad había visto a un tigre. Tal y como informa The Scottish Sun, los agentes rápidamente fueron al lugar donde había sido avistado el gran felino para evitar que nadie sufriera daños.
Policías escoceses rodean a un tigre durante 45 minutos en Aberdeenshire… hasta que se dan cuenta de que es de peluche
Sitiaron al animal, rodeándolo para evitar que se escapara y contactaron con un zoológico local para saber si habían sufrido una fuga de un tigre. Tras vigilar al animal durante 45 minutos, comenzaron a sospechar que algo raro ocurría con él porque no movía ni un pelo. Poco a poco, los agentes fueron acercándose hasta el felino hasta darse cuenta de que era un peluche.
Policías escoceses rodean a un tigre durante 45 minutos en Aberdeenshire… hasta que se dan cuenta de que es de peluche
El inspector George Cordiner declaró a BBC que la intención de la policía siempre es «proteger al público y mantener a salvo a los agentes cuando encaran situaciones inciertas». «El incidente duró 45 minutos, hasta que los agentes se aseguraron de que no existía ninguna amenaza», dijo asegurando que la policía se tomó la llamada como algo serio y no como una broma del granjero: «Pensamos que fue una falsa alarma hecha con la mejor de las intenciones».
Eso sí, falta por saber quién dejó el peluche en el lugar esperando que alguien picase en la broma ¡y tanto que picaron!