Manda cientos de botellas con mensajes de amor y lo denuncian por contaminar

Craig Sullivan, un viudo escocés, añoraba a su esposa y quería enamorarse de nuevo, pero su idea de lanzar botellas con mensajes de amor al mar se le terminó volviendo en contra.

Sullivan escribió cientos de mensajes de amor y los puso en circulación de una forma muy romántica, pero contaminante. Su objetivo era muy ambicioso: «quería que mis mensajes llegasen a playas de todo el mundo». Y lo cierto es que comenzaba a tener éxito y a recibir respuestas para posibles citas.

Sin embargo, las múltiples quejas vecinales terminaron en denuncia. Primero se le advirtió de forma amistosa y él aseguró que su intención no era contaminar, pero claro, alguien tenía que recoger los cientos de botellas que quedaban varadas en las cercanías y el asunto pasó a mayores a causa de la denuncia interpuesta por la Agencia de Protección Ambiental del país.

Tras el embrollo, explicó que «los cauces normales para conocer mujeres suelen ser las páginas web de contactos y me parecieron algo menos apropiado».