Muere sepultado por una colección de revistas porno de seis toneladas

El porno mata, es la conclusión que obtenemos de esta triste historia, que protagoniza un japonés sepultado por su propia colección de revistas.

Joji, como se le ha llamado en la prensa nipona, era un señor de 50 años que coleccionaba revistas para adultos y tenía la casa llena de ellas. El baño, la cocina, el salón y todas las habitaciones rebosaban de estas publicaciones que al final le han costado la vida.

Aficionado a las revistas en papel de toda la vida, se desconoce si también consumía porno por internet, el medio que ha sustituido la primera opción en un alto porcentaje de usuarios. Y tampoco están claras aún las causas de su muerte, ya que se baraja la opción de una muerte natural y que las estanterías cayeran más tarde o que realmente muriese sepultado por ellas y sus gritos no se oyeran por la gran cantidad de papeles que tenía encima.

Lo más triste de la noticia es que Joji llevaba seis meses muerto y solo fue descubierto cuando su casero entró en el domicilio ante los impagos que sufría. Por eso llama la atención que la familia del fallecido contratase a una empresa de limpieza que actuase con discreción y evitar la vergüenza. Es decir, tras seis meses sin saber nada de Joji ahora les preocupaba la imagen. Pero bueno, el tiro les salió por la culata porque uno de los operarios de limpieza fue precisamente quien publicó las imágenes en las redes sociales.

Así estaba la cocina del fallecido, llena de revistas para adultos