El Ayuntamiento de Arcos ha iniciado la anunciada obra de restauración de redes de suministro y saneamiento de aguas en la calle Reina, unos trabajos que ayudarán a detener teóricamente el hundimiento que sufren las calles y avenidas aledañas, especialmente plaza España, Paseo de Andalucía y avenida Muñoz Vázquez, sin que, por ello, sea una solución definitiva a este grave problema.
Los trabajos, ejecutados por la empresa Aqualia dentro de su convenio con el Ayuntamiento, vendrán a levantar literalmente toda la calle durante dos o tres meses, que es el plazo estimado de la obra. Esta intervención está presupuestada en un total de 138.000 euros y cuenta además con la participación de otra empresa local.
El delegado municipal de Urbanismo, Manuel Garrucho, presente en los trabajos, asegura que es “una obra integral” con cargo a las inversiones de la empresa Aqualia y que se instalarán nuevas redes de suministro y saneamiento con su correspondiente drenaje y sistema que evite su rotura en caso de desplazamiento o deslizamiento de los terrenos.
El mismo admite que la red de saneamiento de la calle está destrozada y que ésta puede ser la causa de los problemas de filtraciones y humedades de las viviendas de la zona que se sitúan a una cota más baja. No obstante, Garrucho piensa que existe “demagogia” por parte de los partidos políticos que solicitan una actuación más profunda en toda la avenida Muñoz Vázquez en detrimento de la inversión prevista por Aqualia para la construcción del depósito de agua de la Cuesta de la Escalera, ya que estos partidos, fundamentalmente Ai-Pro e incluso un grupo de vecinos afectados, viene reclamando la sustitución de una obra por la otra por una cuestión de prioridad. Además, se cuestiona por qué el grupo que ahora reclama el arreglo de toda la avenida no lo hizo en su etapa de gobierno, y que decidió entonces emplear el canon de Aqualia de siete millones de euros en otras obras que consideró en su momento prioritarias. Así, Garrucho cree que las demandas de la oposición tienen un tufo electoralista a falta de menos de un año para la cita con las urnas.
Sin embargo, el delegado de Urbanismo señala que, dentro de la importancia de la actuación de la calle Reina, la obra no será “la panacea” porque no resolverá completamente los problemas que registra buena parte del centro urbano de la ciudad. En este sentido, Garrucho defiende que el equipo de Gobierno no actúa con populismo ni “a salto de mata”, ya que es una obra debidamente planificada y proyectada. “Hay que ser coherentes y este equipo de Gobierno ha encontrado los recursos para actuar en la calle Reina. Nuestro alcalde nos ha encargado que estudiemos seria y coordinadamente la obra del Paseo, porque si no es así nos encontraremos con otra Verbena -explica en alusión al grave problema que sufre la barriada-. Porque lleguen las elecciones no todo vale y que tampoco nos rasguemos las vestiduras”.
Asimismo, dio las gracias a los vecinos por la comprensión ante las molestias que lógicamente ocasionarán las obras.
El aparcamiento
Al cierre de esta edición, Ayuntamiento, vecinos y la propiedad del aparcamiento del Paseo intentaban alcanzar un acuerdo para abaratar el coste del aparcamiento para los afectados de la calle Reina, ya que no podrán entrar con sus vehículos ni en la calle ni el parking de ésta durante el tiempo que duren los trabajos. Cabría la posibilidad en este sentido de que, quienes no quieran hacer uso del parking privado, sí puedan beneficiarse de la zona azul, según avanzaba Manuel Garrucho, que insistió en dar las gracias a los vecinos por encajar una obra que será molesta a todas luces, entre otros motivos porque afecta a una calle en pleno centro urbano de la ciudad.
