El paro convocado por la Plataforma Nacional en Defensa del Sector de Transporte, que este lunes cumplió dos semanas, ha puesto de manifiesto la dificultad que sufren los autónomos para llevar a cabo huelga y reivindicar sus derechos.
La secretaria provincial de CCOO, Inmaculada Ortega, lo reconocía a preguntas de VIVA CÁDIZ, apuntando a la falta de regulación para los trabajadores por cuenta ajena, a diferencia de los asalariados. “Comprendemos, respetamos y apoyamos las reivindicaciones del sector”, señaló, pero sostuvo que los sindicatos no tienen margen de actuación.
Las organizaciones sectoriales, sin embargo, también encuentran dificultades para entablar diálogo con el Gobierno central. Los taxistas gaditanos suspendieron in extremis las movilizaciones previstas para este domingo, gracias al acuerdo alcanzado el viernes entre el Comité Nacional de Transportes de Carretera, al que pertenece la Asociación Nacional del Taxi, y el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, por el que contarán con ayudas directas por valor de 450 millones de euros y bonificaciones con 20 céntimos de euros por litro o combustible.
Pero los transportistas que conducen vehículos con menos de 7.500 kilos han quedado fuera, lamenta el vicepresidente de ARGA, Juan Manuel Florentino, en Cádiz. “Falta organización a nivel nacional”, explica, porque “no tenemos recursos suficientes”. Florentino reconoce división entre los asociados sobre si suspender la actividad ante el incremento de la factura del combustible. “La situación es insostenible”, pero el coste de llevar a cabo un paro es inasumible. Con todo, el precio de los carburantes no es el principal problema. “El Ayuntamiento suprime plazas de carga y descarga y no las repone, no dejamos de pagar multas y hay problemas de circulación”. Tampoco encuentran interlocución en el equipo de Gobierno, advierte, con una sensación de desamparo total.
