Jerez

Malos tiempos para la familia del pequeño Marcos Carribero

Las revisiones de su operación del pie les obliga a ir a Madrid cada 10 días

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  • Marcos y su familia. -

Hace cinco meses todo eran alegrías para los padres del pequeño Marcos Carribero, el niño de 10 años afectado de una cardiopatía congénita. A su veintena de operaciones, la primera con apenas días de vida, y varias de ellas a corazón abierto, se sumaba una última para corregir sus malformaciones de la planta del pie derecho y el doctor que se ofrecía a intervenir sin cobrar sus honorarios era Ángel Villamor, traumatólogo personal del Rey Juan Carlos.


Todo salió a la perfección y la familia nunca podrá estar lo suficientemente agradecida, ya que sólo tuvo que correr con los casi 700 euros de la medicación. De no ser por el gesto del especialista y su equipo el coste de la intervención se hubiera ido por las nubes y hubiera sido imposible. Sin embargo, con lo que no contaban es que con las revisiones posteriores que acarrearía esta operación, las cuales se tienen que llevar a cabo cada 8 ó 10 días y forzosamente por ser una técnica especializada que sólo practica este especialista. El problema es que esto les está suponiendo un gasto cada vez que van a la capital de cerca de 450 euros, sólo en transporte, pues van y vienen en el mismo día. “Allí comemos bocadillos, pero solo en el tren y en el taxi se nos va todo ese dinero, pero todo va muy bien y el doctor me ha dicho que no lo deje de traer”, señala Juan Carribero, padre de Marcos.


Pero lo que más les preocupa ahora es que en las últimas pruebas enviadas de Boston se han detectado nuevas complicaciones en su cardiopatía, por lo que le están tratando también en el Hospital Gregorio Marañón, y los médicos no descartan que tenga que regresar a Estados Unidos a operarse. Con una ayuda de 400 euros y otros 400 de la pensión de Marcos la familia asegura sentirse “asfixiada” por los gastos,  pero tienen claro que la prioridad es su hijo. Por eso, están pendientes de participar a finales de semana en el programa Tiene Arreglo de Canal Sur en busca de ayuda y su padre Juan se reunió ayer con la delegada de Bienestar Social, Isabel Paredes, para pedir una vivienda más económica. La suya la perdieron. Ahora no pueden hacer frente al alquiler de 560 euros de una vivienda de Emuvijesa, y deben más de 4.000 euros. Su otro miedo es verse en la calle.

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